miércoles, 28 de agosto de 2013
Felices 23
domingo, 28 de octubre de 2012
Rocío reloaded
miércoles, 27 de junio de 2012
Recuerdos
martes, 26 de junio de 2012
Veintisiete de junio
lunes, 25 de junio de 2012
Incertidumbre
sábado, 23 de junio de 2012
Tan Biónica en el Luna Park 23/06/2012
domingo, 25 de marzo de 2012
Parte I
jueves, 1 de diciembre de 2011
lunes, 21 de noviembre de 2011
21/11, segunda parte
Hoy fue peor de lo que imaginaba. Anoche, soñé con vos. Como todas las noches desde aquel 9 de septiembre. SI, todas las noches. No sé en qué momento deja de ser una cosa linda para transformarse en una pesadilla que me persigue todos los días, incesantemente. Levantarse, todavía pensando y viviendo en la última imagen del sueño, es como una visión borrosa, y me veo a mi misma con vos al lado. Generalmente cuando me despierto es tarde, tengo que correr para llegar a la facultad y claramente, vos no estás ahí. A cada segundo, a cada minuto, el dolor y el vacío van comenzando a adueñarse de mi cuerpo… Ya es normal, no hay de qué preocuparse, me pasa todos los días. En el camino a la parada del colectivo prendo el mp4 y nunca sé qué escuchar, así de indecisa soy. Me subo al colectivo y busco un lugar cómodo y al compás de la música, pienso. Los demás pasajeros deben pensar: Qué tremenda cara de orto. But guess what? I don’t care. Distintos momentos memorables se me vienen a la cabeza, ah, eso, nunca falla. SIEMPRE son recuerdos. Recuerdos de un día cualquiera, recuerdos de algún día especial. Siempre hay algo que me recuerda hasta el más mínimo detalle de cualquier cosa y ahí empiezo a tejer una larga historia de recuerdos. A veces me detesto por tener tanta memoria asociativa.
Hoy me puse a pensar en un recuerdo en especial… Nuestra primera cita. Y todo por qué? Porque alguien me nombró “First Date” de Blink 182. Cómo asociamos eso a nuestra primera cita? Porque desde el momento en que me subí al 110 para ir a encontrarme con vos hasta que me bajé, escuché sin cesar esa canción. Qué lindo, no? Que una canción tan alegre me ponga tan triste hoy. I guess que cuando estaba ahí parada en el colectivo wearing mi buzo de Mickey, mi chupin y mis zapatillas rojas (dressed horriblemente) ni se me pasaba por la cabeza que todo esto iba a resultar así. Me bajé del colectivo y tenía el corazón en la garganta, lo recuerdo y siento las tan boludas mariposas en la panza. El momento en que te vi llegar a la esquina y esperar que el semáforo se pusiera en verde, sentí que me moría. Venías con los apuntes de matemática en la mano porque me ibas a explicar para la prueba de Martinuzzi. Te saludé, sentí tu olorcito y me enamoré. Escuché tu voz y me acuerdo que pensé “no puede existir nada más lindo que esto”. Sorprendentemente para un primer contacto, hablamos bastante hasta llegar al Mc Donald’s. Me dijiste que tenías hambre cuando yo solo pensaba comer un mcflurry, más vale que no tenía hambre, con los nervios que tenía…. Como no tenía más que 10 pesos para el helado, vos me pagaste un doble cuarto de libra… Fuimos a una mesa arriba y almorzamos. Luego, intentaste explicarme matemática pero.. como yo no cazaba una, terminamos haciéndonos dibujitos… jaja, obvio que todavía lo conservo. La siguiente decisión fue ir a Sacoa en el Paseo Alcorta a jugar a “Deal or no deal” qué capos, ganamos 200 tickets con los que compramos muchas golosinas. Después, compramos el tan deseado mcflurry y fuimos a tomarlo ahí, al club de amigos, sentados a un lado de la avenida Libertador, yo te miraba, deseándote.. Esperando que reacciones. Lo primero que se me ocurrió hacer fue mancharte con helado, pero no dio resultado. Tuvo que pasar como una hora más de charla para que finalmente ocurriera el tan tan esperado beso. Recuerdo haber sentido que lo había hecho horrible y que no me ibas a querer mas, pero no fue así. Después de un ratito, siendo ya las 7 y media de la tarde, emprendimos la retirada, abrazados, caminando por Scalabrini hacia la parada del 110. Me abrazabas fuerte porque hacía frio, y yo estaba inigualablemente felíz. Cuando vino el 110, me diste un beso, otro más, y ya sentía que no podía ser más feliz….
Qué mas quiero que recuperar esos momentos, qué más quiero que revivir todo ese día junto a vos. Una vez más… Quiero tenerte para mí, otro día, aunque sea… No puedo morir sin tenerte una vez más..
domingo, 20 de noviembre de 2011
Veitiuno de noviembre, qué día.
(pausa)
Sigo... Un día como hoy hace dos años me mandaba el siguiente mensaje de texto: "yo tmb payasita te re amo y la toy pasando genial desde q te conoci, me cambiaste la vida". Lo acepto, no fue la mejor idea del mundo ponerme a leer mi cuaderno violeta donde tengo ochentamil cosas guardadas que claramente me remiten a él. Pero, por más difícil que sea de entender, no hay otra cosa que me acerque más a él que leer todo lo que me escribió cuando eramos felices juntos. Y si, puede ser interpretado como masoquismo puro porque de hecho hace 2 horas estoy llorando, tuve que hacer una pausa porque no daba más. Estando tan, tan lejos como estamos ahora, qué más me va a acercar a él que eso?
A veces es difícil entender que lo extraño.. Que extraño esperar los sábados con toda la impaciencia del mundo, que extraño sentir la emoción de escucharlo tocar el timbre y 5 minutos después oírlo subir las escaleras y poco después, encontrarme con su cuerpecito en frente mío. Extraño recibir incesantes mensajes de él pidiéndome que me conectara o en su defecto, contandome boludeces... Extraño dormir con él abrazada, cada noche de sábado y por ende, extraño levantarme al lado suyo a la mañana. Extraño hablar con él todos los días. Extraño que me haga regalos cuando menos me lo espero. Extraño que venga a reuniones familiares mías y yo ir a las suyas. Extraño acompañarlo y que me acompañe a todos lados. Extraño mirar películas boludas y no boludas con él. Extraño cagarme de risa con él. Extraño ver su cara de contración en los partidos de River. Extraño verlo jugar y hacer feliz a mi hermanita menor. Extraño que tenga gestos de atención con respecto a ella. Extraño que me haga parte de su vida diaria, y que me cuente todo lo que hizo en el día sin saltearse un detalle. Ni hablar de lo que extraño ver su sonrisa, sus ojitos... sentir su calor humano y que su olorcito a desodorante quede impregnado en mi ropa y sábanas cada vez que lo veo. Es dificilísimo no acordarme de él o intentar olvidarme cuando cada cosa que veo y/o escucho me lo trae otra vez. Voy a mi cama y veo el peluche que me regaló, veo mi biblioteca y están los cientos de libros que me compró, miro la pared y están sus fotos. Alguien que me diga por qué desapareció de esta manera de mi vida, qué fue lo que lo llevó a hacer esto, a querer irse, a no conectarse, a no dar señales de vida.. A veces siento que todo esto que me pasa es simplemente una prueba.. para ver cuánto tiempo aguanto sin salir corriendo a buscarlo por todos lados.
lunes, 14 de noviembre de 2011
The one that got away....
miércoles, 9 de noviembre de 2011
you mean so much to me...
domingo, 6 de noviembre de 2011
maybe it's not my weekend, but it's gonna be my year!
viernes, 4 de noviembre de 2011
You can do anything, don't be afraid.
We're gonna find our way