Para vos, amiga mía. Esa con la que comparto todo, todo lo esencial, desde lo más general, hasta el detalle más especial. Esa amiga que no veo seguido (nada seguido) y sin embargo, siempre está ahí para mí, leyendomé, o en su defecto, escuchándome, y nunca se lo tengo que pedir, que lo hace, y no pide nada a cambio. Con esa que me rio sin parar de las estupideces que solamente ELLA entiende. Porque es como si el destino nos hubiera unido para cumplir nuestra misión: complotarnos contra el enemigo (aunque yo “duerma” con él). Porque ese es nuestro punto débil, y aunque pasamos la mayor parte del tiempo diciendo cuánto lo odiamos, yo se que lo adoramos, y que queremos que todo sea como antes. Pero que esta vez, cambien algunos papeles, ¿no pensás, Juli? ¿Nos ves a nosotros sentados en la plaza de la bond, tomando una coca, riéndonos hasta tarde, juntos, casi inseparables, dejando de lado la fama y los fanáticos, una vez a la semana?
Quiero que sepas, mi querida Julieta, que indirectamente, gracias a él te conocí. Así que, indirectamente gracias, innombrable, pero directamente gracias, Eugenia.
¿Te acordás aquél 22 de diciembre? Cuándo te pregunté tu nombre, y vos no me respondías, y debo decir, que en ese primer momento, te catalogué de mal manera, y fue entonces cuando él te dijo “te están hablando, Lucía” y vos lo puteaste por haberte dicho Lucía, y me dijiste que te llamabas Julieta. Ese día nos reimos un poco, pero nos mantuvimos distantes. Te marchaste, te envidié de la mejor manera y sentí los celos más intensos que alguna vez tuve.
El punto, es que ahora, todo es totalmente diferente. Sos una de mis mejores amigas y, ¡las más importantes! Tengo una foto tuya conmigo pegada en mi pieza junto con otras 3 con mis demás amigas. Es interesante y bizarro el tema, cómo cambiaron las cosas desde ese día. Hablamos un montón siempre, sabés toda mi vida, me confiás cosas que no le contás a nadie, y yo también te digo cosas que ni loca le digo a alguien! Somos tan parecidas, “como dos gotas de agua”, diría yo. Vos estuviste enamorada de alguien que te hizo mierda y que yo conocí, y ayudé, y de quién fui amiga y con quien “estuve” un tiempo, y ahora, me da igual lo que haga de su vida, y bueno, viseversa.
Siempre me das consejos que después no sigo, porque me es imposible no acordarme de él, Juli! Y yo te escucho cuando decís que no lo querés más al otro adefesio, pero yo sé que en el fondo, ese dolor que sufriste, fue realmente por algo.
La mayoría de las veces, después de un rato de hablar con vos, me doy cuenta de que te extraño, porque vos me hacés reir mucho y me hacés olvidar de todos mis problemas, y entonces te mando mensajes, y vos me respondes, me rio, y me dan ganas de hablar con vos, pero no tengo crédito, así que tengo que esperar hasta el día del arquero, cuando te vea conectada para hablarte.
Vos, mi querida Bella ♥ , enamorada del joven Edward, que en realidad pertenece al dulce Jacob (según el test de facebook) vos, amiga con la que quiero compartir todos los años que me queden de vida, vos, que me entendés y muy bien (mejor que muchas otras personas), de la que nunca me voy a olvidar, a la que siempre voy a molestar para que no me olvide, a vos, Julieta Lucía, me toca decirte, porque nunca lo formalicé (claro...) que te adoro, te amo, te aprecio, te quiero, mas todas las maneras de decir “te quiero”. Que siempre voy a estar ahí, como sé que vos vas a estar para mi. Que siempre voy a darte una mano cuando la necesites, un consejo cuando lo precises, una mano para levantarte, un hombro para llorar y un chiste para hacerte reir, cuando, como y donde sea. Sos muy importante para mi, y de eso no te olvides nunca, porque a vos, nadie te va a reemplazar, y te lo juro, Julieta, te amo muchísimo!
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